Fecha: 16-02-2013
Participantes: 4Distancia: 48km
Desnivel: 1100m
IBP: 101B*
El tiempo obligó a cambiar de fecha una semana más la ruta oficial del club. Además cambiamos también el itinerario previsto y fue Antonio quién hizo de guía en la tarde de ayer. Manuel, Julio y Yo (César), seguíamos cautos su rueda.
Partimos en dirección a La Zona para conocer nuevos caminos. Buen ritmo inicial que fue disminuyendo en proporción a la inclinación que tomaba el camino. Poco a poco Manuel revolucionaba la Caliber y el sherpa quedaba algo retrasado de su tarea.
Tras los primeros repechos llegamos al camino que baja desde el Puerto de Los Cerezos hasta el Cañamero y comenzamos a subir en serio, buenas rampas y Julio que "cuasi" estrenaba calas besa el suelo en uno de los giros de 180º para tomar una curva. En pleno ascenso nos encontramos con perros y perreros que volvían de una montería y ante la ausencia del guía nos pasamos el camino que pretendía mostrarnos.
Tras escuchar unas voces por detrás volvemos sobre nuestros pasos para retomar el susodicho camino donde Antonio muestra a Julio que no debe hacerse al girar pronunciadamente en subida, segunda caída tonta que acaba con el codo del farma algo magullado. He de reconocer que el camino es muy chulo, tras una pequeña subida pasamos a una bajada escandalosa donde algunos tramos son de vértigo, además está cerrada de flora haciendo más espectacular su paso.
La única pega es que nos deja en la carretera nueva que va de Cañamero a la rotonda de las antenas. Tras debatir hacia donde tiramos, decidimos subir hasta el pantano de Cañamero y hacer el descenso por la zona del matadero...como era de esperar no deja indiferente a nadie.
Retomamos el ascenso hacia las antenas por la antigua carretera y Julio comienza a sufrir seriamente de su espalda, bajamos el ritmo, paramos las veces necesarias...pero finalmente las molestias son tan insoportables que optó por avisar al coche escoba. Yo continúo hacia arriba en busca de Manuel y Antonio que me esperan en la rotonda para subir a las antenas, cruzar el Romilano y bajar, arriesgando el tipo, hasta la cima de Los Cerezos.
Rellenamos bidones y como la noche acecha decidimos bajar el puerto hasta llegar a Logrosán con tiempo de poder limpiar las bicis.
Ruta tranquila en la que nos damos cuenta que aún hay muchos caminos que rodar a pocos kilómetros de casa.
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