Las Zetas de la Pedriza

Ruta: Las Zetas de la Pedriza
Participantes: 2
Distancia: 32km
Dificultad: Alta

A las 08,45h empezaban las primeras fatigas del día, mi coche intentaba conquistar la cima de Becerril de la Sierra para llegar a casa de Sergio, la nieve caída durante el día anterior y la helada de la noche hacían del ascenso las primeras complicaciones del día. Tras conseguir llegar a su casa y hacerles la revisión de rigor a nuestras bicicletas, nos vamos directos hacia el “Bar las Terrazas”, a 100m de casa de Sergio. 

Allí, nuestro gran amigo y camarero Manolo, nos prepara como cada mañana rutera, unas tostadas con tomate, aceite y un café con la leche bien caliente. Tras intercambiar impresiones con los camareros y con los clientes que allí paran cada día, llegan a la conclusión de que no tenemos la cabeza en nuestro sitio, auguran que las condiciones climatológicas y el estado del firme, no son las más óptimas para la práctica del ciclismo de montaña. Aun así, tras comernos otro par de tostadas cada uno, nos ponemos en marcha sobre las 10h…

Foto de las vistas de la sierra que debíamos ascender a lo largo del día

La mañana es fría (-1Cº) y aunque vamos bien abrigados, las primeras pedaladas dentro del pueblo se hacen duras. El sonido de nuestras bicicletas pisando el barro y el hielo es todo lo que se escucha a lo largo de la calle principal.

Rápidamente nos metemos en un camino que transitamos habitualmente y que va dirección a Moralzarzal, es un camino amplio y con falso llano que nos permite rodar a buen ritmo, algunos charcos pero ligeramente sorprendidos por el buen estado del camino, la nieve brilla por su ausencia… !!!!Tras rodar unos 5km y cruzarnos con otro grupo de unas 15 personas, llegamos a Mataelpino, otro pueblo de la sierra, cogemos 500m de carretera y entramos en otro camino que nos empezará a poner las piernas,  pulsaciones y las tostadas de Manolo en nuestro sitio. Rápidamente nos encontramos con un ciclista que transita por nuestro camino. Tras darle los buenos días, y explicarle cual es nuestro itinerario previsto, Sergio se pone “de pie” sobre su Cannondale Scalpel y comenzamos con las primeras rampas en ascensión que nos llevarán poco a poco hacia la base de “La Pedriza”, montaña que intentaremos coronar..

La subida es divertida, algo técnica en algunas zonas y con unas vistas espectaculares. Antes de llegar al camino que nos llevará a subir “Las Zetas”, subimos una pista forestal totalmente anegada por el agua y el deshielo de las montañas,qué coño... es un puto río!!, abrimos un par de puertas y seguimos ascendiendo. Justamente antes de llegar al camino que dije anteriormente, en el que se gira a la izquierda para ascender a Las Zetas, un superbiker nos adelanta a buen ritmo, rápidamente reconoce Sergio que es un amigo suyo, un compañero de bicicleta de carretera con el que monta en ocasiones.  Por mi desconocimiento en la ascensión a Las Zetas, decido marcar mi ritmo y no “cebarme” con nadie, los que no somos buenos escaladores ,debemos tener esa sangre fría que hace en ocasiones, ver como con un pequeño “subir de piñones”, el resto de la gente te abre hueco rápidamente…

Tras subir unos 4km, llega el momento de soltar lastre, como decimos en nuestras salidas ciclistas, “parada diurética”. Rápidamente nos disponemos a subir en nuestras máquinas y….COÑO!!!Pero si es el “tio” que nos encontramos en Mataelpino!!!!!, el que nos preguntó por nuestro itinerario..

Tras 1km de ascensión, Sergio comienza a coger ritmo, a la caza de su amigo el ciclista de carretera..!!Yo continuo conversando con el nuevo amigo hasta que me comenta; “pues yo soy minusválido”, es ese el momento en el que te entra un “perendengue” por el cuerpo, me pongo a observarlo y me doy cuenta de que va con una sola pierna!! la otra es tan solo de apoyo y apenas tiene masa muscular. Le comento que para ser minusválido no va nada mal y me lo demuestra poniéndose en pie encima de la bicicleta, baja piñones y….UP!! empieza a tirar a la caza de Sergio. En ese momento empezamos a encontrarnos con el camino cada vez mas nevado, salirse de la rodada de otros ciclistas supone toda una aventura, el paisaje empieza a ponernos los pelos de punta, entre brumas y claros, se empiezan a divisar las llanuras de las faldas de la sierra… Nos encontramos con gente practicando senderismo por la nieve y a una pareja de ciclistas exhaustos, adelantamos sin problemas. El cojo se queda y lo rebaso sin problemas, intenta seguir mi rueda sin éxito.

Rápidamente llegamos al primer llano de la ascensión y paramos para inmortalizar el fabuloso día de nieve.

Tras rodar unos 2km mas, optamos por coger un camino que nos llevará a descender de nuevo.

El camino se hace totalmente impracticable, tenemos que “echar pie a tierra” en numerosas ocasiones…

Del descenso poco que decir, UNA AUTENTICA ANIMALÁ!!!!!!Lo siguiente a peligroso, resbaladizo e inhumano. Una autentica pista de patinaje…

(el que viene detrás es el “cojo”)

Os espero a los que queráis por la sierra madrileña para compartir ésta bonita afición.

Sin más, agradeceros a todos vuestras aventuras a través de este magnífico canal creado por César, os sigo!!!

Un abrazo,

By Carlos Martín de Vidales Paz